Hoy en día el mercado laboral requiere de profesionales
diferentes, abogados que dominen el conocimiento, pero
que a su vez sepan aplicarlo a situaciones cambiantes.
Se requiere de profesionales que se adapten al constante
cambio y que también dominen la tecnología. En este
sentido es importante tener presente que [2] “...la tecnología
hace nuestra forma de vivir cada vez más sencilla pero a
la vez estos avances están originando impactos sociales y
culturales inimaginables. La automatización y la robótica
están generando un nuevo fenómeno conocido como
“desempleo tecnológico”. Las tecnologías de hoy van a
hacer desaparecer ocios que nunca hubiéramos pensado
que podrían ser reemplazados por máquinas.”
En el campo del Derecho ya se han dado intentos en
“robotizar” la aplicación del Derecho a casos concretos.
Así en Estonia, se trabaja en un proyecto de “jueces robot”,
el cual se encuentra en una fase de experimentación, [3]
“… Su aplicación funcionará de la siguiente manera:
las dos partes cargarán sus documentos e información
relevante del caso en una plataforma, donde la IA tomará
una decisión que pueda ser apelada por un juez “humano”.
Este no es el único caso ya que en algunos estados de
los Estados Unidos, se utilizan algoritmos que ayudan a
recomendar sentencias penales a los jueces. Actualmente
“El caso más conocido es el del chatbox impulsado por
DoNotPay, con sede en Reino Unido, que ayudó a anular
160,000 multas de aparcamiento en Londres y Nueva York
en los últimos años.” [3]
Sin embargo, en nuestro país está muy lejana esta
posibilidad y los abogados son necesarios en muchos
ámbitos. Sin embargo, es innegable que se requiere de un
nuevo profesional en Derecho. Este abogado del siglo XXI,
debe saber trabajar en equipo, conocer de tecnología y estar
preparado para los cambios constantes en la aplicación del
conocimiento. Por lo tanto, es urgente cambiar el modelo
de enseñanza-aprendizaje del Derecho a n de formar a los
nuevos profesionales que requiere la sociedad.
2. Propuesta de Enfoque STEM para la
enseñanza del Derecho.
Tomando en consideración la necesidad de un cambio toral
en la enseñanza del Derecho, es que se propone el enfoque
Stem como una nueva herramienta en la enseñanza-
aprendizaje del Derecho.
Es importante indicar que nuestra propuesta toma en
consideración varios puntos esenciales. En primera
instancia, los estudiantes que actualmente llenan las
aulas han cambiado. La tecnología hace de ellos personas
pensantes, con acceso ilimitado a la información y abiertas
además a nuevas estrategias educativas. Por otra parte, el
rol pasivo ya no combina con ellos y se requiere que tomen
un rol protagónico en su proceso de formación académica.
Por otra parte, es importante tener claro cuál debe ser la
función del docente universitario dentro del nuevo modelo.
Actualmente su función tradicional está relacionada como el
modelo conductual. Según expone Cruz [4] “Se piensa con
frecuencia que la esencia del trabajo del docente es enseñar,
pero dicha concepción es propia de los modelos centrados
en el profesor y en su desempeño. Podemos analizar esta
concepción de modelo educativo en las actividades realizadas
por el profesor y por el alumno en el Modelo Centrado en la
Enseñanza, el profesor explica los temas en clase, expone sus
conocimientos, encarga tareas, elabora exámenes y calica;
mientras que el alumno atiende a las explicaciones, trata de
adquirir los conocimientos, realiza tareas, se prepara para sus
exámenes y aprueba o reprueba.”
En el modelo educativo que se propone, la función del
docente diere, para Díaz-Barriga y Hernández [5], “El
trabajo del docente no es enseñar, el trabajo del docente es
propiciar que sus alumnos aprendan” Esta concepción se
adapta plenamente a nuestra propuesta.
El uso de la tecnología como herramienta de enseñanza-
aprendizaje es esencial. Los jóvenes de hoy ven la
tecnología como algo normal y hasta esencial en sus
vidas, ya que conviven con ella gran parte del día. Desde
este punto de vista, el docente debe aprender a utilizar
la tecnología en actividades educativas y no verlo como
un simple distractor. La presencia en el aula de teléfonos
inteligentes o Tablet facilitarán el cambio.
El trabajo en grupos debe sustituir al trabajo individual,
especialmente utilizando la modalidad de grupos
colaborativos. Para Glinz [6] “ La educación en la
actualidad requiere del trabajo de grupo. En las actividades
de enseñanza-aprendizaje, el trabajo colaborativo
o cooperativo (términos utilizados indistintamente)
conforma uno de los principales elementos. Los proyectos
innovadores que usan técnicas de enseñanza aprendizaje
involucran esta modalidad de trabajo en la que el ser
que aprende se forma como persona.” Dicha modalidad
de trabajo grupal benecia a todos, ya que obliga a los
integrantes a trabajar activamente y a dar un rendimiento
comprobable. En el mundo moderno, los profesionales
en Derecho deben trabajar en equipo ante la complejidad
de los casos que enfrentan día con día. De esta manera
aprender a trabajar en grupos desde la Universidad es
fundamental.
En resumen, nuestra propuesta es realizar un cambio
completo en el modelo educativo de la enseñanza del
Derecho. Se requiere un enfoque que tome en consideración
el cambio tecnológico, el nuevo rol del estudiante dentro y
fuera del aula y asimismo la nueva función del docente.
Dicho enfoque debe también integrar el trabajo grupal
colaborativo. Desde esta perspectiva el enfoque STEM
en la enseñanza del Derecho resulta una herramienta
interesante.
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Revista Fidélitas
׀ Vol.1 (1) ׀ Mayo 2020